¡Hola a todos!
Acabo de regresar de una increíble experiencia en Arusha, Tanzania, donde trabajé como voluntaria en un orfanato. Fue absolutamente una experiencia que me cambió la vida.
El nombre del orfanato es Amigos de los Niños de Malaika (Malaika en swahili significa ángel) . En estos momentos el orfanato acoge 12 niños de 6 a 11 años de edad, pero hay planes para aumentar el número de niños en acogida en el futuro.
Sinceremente, pasé el mejor momento de mi vida. El primer día nos decidimos a cocinar comida italiana y preparemos juntos una focaccia casera, pizza y tortellini al tomate. Fue muy divertido y era la primera vez en la que yo era en realidad un chef! Quedé profundamente impresionada por las habilidades de trabajo en equipo que poseen todos ellos. Todos querían participar y ayudar con mucha ilusión. ¡Sorprendentemente, a pesar de que todos ellos son muy jóvenes, todavía respetaban las reglas!
Tengo que decir que cada día estaba lleno de alegría y momentos felices. Durante mi estancia habíamos hecho un montón de actividades y aventuras. Un par de días después de Navidad decidimos llevar a los niños a una piscina. Todos ellos estaban muy emocionados de ir a nadar por primera vez y pasaron una tarde maravillosa jugando en el agua, aunque algunos tenían bastante miedo al principio.
También fuimos a un safari donde vieron a los elefantes, leones, leopardos, etc. Para esta aventura de safari nos unimos con otro orfanato que se llama Karama y fue muy agradable ver cómo los niños se hicieron amigos con tanta facilidad.
Durante mi estancia me quedé sorprendida por la increíble carga de optimismo de todos los voluntarios que conocí trabajando allí. Los primeros días me preguntaba donde todo el personal encontró la energía a diario, la ilusión para sonreír y el valor para enfrentar problemas muy difíciles. Rápidamente me di cuenta de que las sonrisas y la gratitud de todos los niños es el más poderoso estimulante para continuar con la labor.
Después de mi estancia en el orfanato, me di cuenta de que cuando se comparte con la gente, lo que recibe de vuelta siempre es más. Lo que mi familia y yo estamos haciendo mediante el apoyo, la organización y coordinación de un orfanato, es sólo una gota en el mar. Sin embargo, es importante recordar que el mar es hermoso y cada gota puede marcar la diferencia.
Este es el sitio web del orfanato que mi familia está gestionando activamente: http://en.malaika-childrenfriends.org/
¡Muchas gracias a todos por vuestro apoyo!